Gris a pesar de calzar botas rosas.

No tengo futuro

Imagen de ACNUR

Caperucita roja y el lobo feroz

Lo que era soñar despierta se convirtió en pesadilla.

Todas las semanas, desde hace tres Fran y yo echamos una primitiva. Me gusta porque por poquito dinero sueñas mucho, y la mayoría de las veces despierta.

Esta semana me tocaba pagarla a mí y entonces le dije a mi chico que yo custodia el recibo, jejeje. Ayer cuando llegó la hora lo miró, me llamó y me dijo que no había tocado nada.

Esta tarde de vuelta a casa con el piccolico hemos pasado por una administración de lotería, y he pensado, que pena, esta semana no nos ha tocado. Mientras me lo iba diciendo me daba cuenta de que la semana aún no había terminado y que el boleto de la primitiva era para el jueves y el sábado. En ese momento el sueño se convertía en pesadilla, una vez más no sabía que había hecho con él. Mis pies se acelararon al ritmo de mi corazón , y sólo quería llegar a casa y ver el boleto en cualquier esquina de mi habitción. Busqué en los sitios en los que podía estar mientras mi madre rebuscaba en la basura, cuando metí la mano en un bolso que no había llevado el día anterior, y... allí estaba. Ufffff menos mal, hoy puedo decir, que me ha tocado la lotería.

“Dilige, et quod vis fac.”

San Agustin.