jueves, septiembre 24, 2009

Podría poner muchas gilipolleces, como es costumbre en mí, cosas que con el tiempo se releen y una siente un poco de vergüenza, y un mucho de añoranza, por tener el valor de escribir tonterías, o ñoñadas, o pensamientos o sentimientos o mentiras, pero bueno, para relajarme, hoy pongo algo que me provoque una sonrisa, y que me ablande el corazón o los sesos aunque estos ya están líquidos como decía Usun del maestro Labordeta.


2 comentarios:

Anónimo dijo...

Qué importantes son las abuelas, de ellas nos viene todo lo que somos.

ElenarTe dijo...

Si me conoces. Mira bien mi foto. Si no, decirte que te tengo que invitar un cafe. Y que fue placer mirar recetas contigo de 3 a 6 de la tarde todos los diaas!! ;)